Espacio de Opinión. (Dejanos tu comentario al final de cada nota) Contacto: majosanchez@gmail.com
martes, mayo 18, 2010
Ni drogas ni bingo: educación, salud y comida.
jueves, mayo 06, 2010
Sólo con mirar hacia el costado
miércoles, marzo 03, 2010
El proveedor de iniquidades
lunes, diciembre 14, 2009
Si ladran, vamos bien
lunes, noviembre 16, 2009
Otro transporte es posible, porque otra forma de gobernar es imprescindible
miércoles, octubre 21, 2009
Ausente sin aviso
domingo, octubre 18, 2009
364 días
viernes, septiembre 25, 2009
Cartón lleno

Ahora, viéndolo en perspectiva, ¿quién no cambiaría la tranquilidad de saber que si un hijo se accidenta, la sala de su barrio va a estar preparada para atenderlo en tiempo y forma por un notebook? Nadie. ¿Quién, en este mundo, preferiría que el colectivo entre en su barrio por nuevas calles y llegar a tiempo al trabajo o a la escuela cuando hay ordenes de compra por $200? Pregunto: ¿qué insensato optaría por que las ratas no estudien con sus hijos en algunas escuelas municipales, cuando existe la gran oportunidad de que alguien, sólo uno de nosotros, se haga acreedor de una taxi con licencia, vaya a saberse de dónde?
Me indigna pensar que haya algún reaccionario que prefiera darle de comer a sus hijos mediante la obtención de un trabajo digno cuando hay algunas becas educativas esperando a un puñado de afortunados que no saben que, en realidad, esas becas no deberían ser premios, sino políticas de estado. En fin, yo, que pago mes a mes, debo tener esperándome algunos cartoncitos de bingo listos, junto a un puñado de porotos. Sólo una idea me queda dando vueltas: para algunos, gobernar Mar del Plata de manera equilibrada, es más difícil que sacarse el Loto.
majosanchez@gmail.com
viernes, septiembre 18, 2009
El Clarín, estridente, sonó
los medios de comunicación los
llevarán a odiar a los oprimidos
y amar a los opresores”
(Malcolm X)
Y a la voz de la Gran Jefa, la derecha corrió. Huyó de un recinto donde la Democracia, Jefa y Señora, se paseaba pletórica, pues el enemigo, aquel que históricamente amparó y creció bajo el poder de los golpistas y asesinos, se batía en retirada. Por un lado, era esperable que el bolsillo de muchos dirigiera sus votos, pero resultó lamentable observar como, sin descaro alguno, se defendían posturas empresariales a capa y espada, que sólo reivindicaban una Ley de la última Dictadura, como si el simple hecho de que fuera un Decreto de Videla, que amparaba monopolios económicos y limitaba las voces del pueblo, no fuese razón más que suficiente para cambiarlo.
Pero hay buenas noticias, muy a pesar de ellos. Hay buenas noticias porque se votó por ideologías, por convicciones. Los que se fugaron amparados bajo el techo de De Narváez, tienen las ideas muy claras: quieren el poder económico para unos pocos que, casualidad, son ellos. Y los que se quedaron a dar el debate, a expresar sus posturas, son los hombres y mujeres que hacen que tengan sentidos estas líneas. No se trata de oficialistas u opositores, me niego a pensar de manera tan simple. Nunca, en ninguna votación de leyes de envergadura como la de Medios de Radiodifusión, la de Flexibilización Laboral, El Decreto 125 sobre las retenciones, etc., hay lugar para votos no positivos. Siempre es igual, se vota en contra o a favor de los pobres. Pueden disfrazarlo como quieran, pero al final de cuentas, es sólo eso lo que importa. Algunos han venido errando el camino, y resulta agradable verlos cada tanto darse una vuelta por la izquierda.
Lo que se logró con esta media sanción, lo que se logrará cuando los senadores la aprueben en unas semanas, es un paso hacia adelante en la senda de la libertad, alejándonos otro paso de la noche más negra de nuestra historia. A aquellos que se arrastraban en la oscuridad hace 30 años, ganando fortunas por mirar para otro lado, por ser funcionales al genocidio, que vivieron cómodos y cobijados todos estos años, deberán empezar a acostumbrarse que a las ideas ahora no se las calla con las botas, sino que se defienden con los votos.
Mar del Plata
majosanchez@gmail.com
martes, julio 28, 2009
Viva la diferencia
“Este concierto se lo dedico a la
señora Justicia, en honor a las
vacaciones que parece se está tomando”
(V for Vendetta, Larry y Andy Wachowski)
Las obligaciones ideológicas son ineludibles. Podemos dejar de hacer muchas cosas, olvidarnos de otras tantas, pero cuando de Ideas se habla, -creyendo profundamente en ellas, claro-, no pueden esperar. Esas obligaciones las juzga la conciencia... y a mi me gusta dormir tranquila. La responsabilidad que tenemos con aquello en lo que basamos nuestras reflexiones, aquello que pensamos y decimos, no puede ser evadida.
Hoy, al leer las declaraciones de Mario Llambías, titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), donde manifiesta su respeto al ex ministro de Economía de la última dictadura, José Alfredo Martínez de Hoz, siento la necesidad de diferenciarme, de decir que no soy ni mejor ni peor que él, pero si afirmar que soy otra cosa, que no soy lo mismo.
Es imposible no ver como ciertos dirigentes rurales cada vez se esfuerzan menos por ocultar sus simpatías y afinidades con momentos siniestros de nuestra historia y con quienes perpetraron un genocidio hace 30 años. No es la primer declaración de este estilo que genera la misma vergüenza y la misma bronca: hemos oído en boca del presidente de la Sociedad Rural Argentina, Hugo Biolcati, frases golpistas que, junto a lo dicho ayer, me niego a dejar pasar de largo, porque podemos oponernos a esos dichos hablando con amigos, compartiendo algún café, pero quienes militamos por la igualdad de oportunidades, por la justicia social y por sostener el sistema democrático, debemos hacer oír nuestro repudio. Porque cuando se expresa respeto hacia alguien como Martínez de Hoz, utilizando los medios de comunicación que se le brindan con generosidad, no sólo se lo hace por ser uno de los fundadores de la Sociedad Rural Argentina, hay mucho más detrás de eso. Algunos, los que cuentan de a millones y lloran los centavos, parece, pueden decir lo que sea, donde sea y cuando apetezcan; otros, da la impresión, los que viven en la desigualdad o la injusticia, sólo tienen derecho a mantener la boca cerrada y la panza vacía.
Sino, todas y todos aquellos miembros de la clase política que digan encuadrarse en los espacios democráticos y progresistas y no condenemos este tipo de expresiones que perjudican no sólo la vida democrática de la República, sino que son ejemplos claros del desprecio con que aún se manejan estos sectores económicos de gran poder, nos convertimos en cómodos encubridores, hacemos del silencio, otra vez, esa herramienta macabra que alguna vez fue, para pasar desapercibidos, para no tener posiciones firmes en momento inciertos, somos aquello que siempre criticamos, somos cómplices.
María José Sánchez
Mar del Plata
majosanchez@gmail.com
sábado, julio 19, 2008
Aplaudiendo a la Sociedad Rural
Me gustaría escribir de memoriosos que baten palmas como verdades irrefutables, pero sólo puedo hablar de sombras fantasmales que se ciernen, volando bajo, como aves carroñeras listas para devorarnos. Y en un acto alguien dice al micrófono “siga don Luciano que está todo bien”. No, don Luciano: está todo mal. Toda esta mezcla cae mal, tan mal que se siente revuelto, a punto de vomitar.
Tanta educación nos falta, tan inmaduros somos, que, en nuestra sociedad, se puede colocar a quienes apoyaron un genocidio al lado de quienes reclaman por seguridad o por que los sueldos alcances a los precios.
Encima la esquizofrenia se transmite por televisión. No quiero verlo, pero siento un deber de la conciencia y me obligo a prestar atención, a ver si todavía ese acto de cerrar lo ojos y taparme los oídos con las manos en un gesto casi inconsciente por preservar la cordura, hace que me parezca a esos que se cosían los párpados y se tapiaban a cal y canto las orejas para no enterarse del dolor de otros. Una vez un español, nunca supe quien, dijo que con la palabra argentino, sólo podía formarse otra palabra: ignorante. Pero no hablamos de la ignorancia de no saber, hablamos de la ignorancia de saber y olvidar o, peor aún, de no aprender jamás.
Hay muchos que hacen política en este país saliendo a pescar cada tanto, firme el mediomundo en la mano, porque saben que en río revuelto está su ganancia. Hoy, en el río sopla el frío viento de una sudestada que atenta con todo, que llega a la orilla dejando el mal sabor del desconcierto y llevándose los restos de un tejido social roto. Tender la mano y pelear por las causas de otros, es llenarle la panza a alguien que no sólo padece el hambre de la falta de comida, sino que sufre la invisibilidad de los prescindibles, es arropar a un mendigo una noche, antes de que muera de frío en la calle, sin nombre, sin pasado, congelado por la indiferencia. Ponerle el hombro a la solidaridad, no es abogar por los que más ganan y nada les importó jamás de aquellos que padecer la indigencia centenaria, no es querer que vuelvan los tiempos de comprar de a dos licuadoras y poder viajar afuera, pero sí es hablar con la voz de los que la perdieron, es reconstruir los lazos fraternales, mirando a los ojos a los que más sufren hasta reconocernos en ellos, hasta saber cuan saladas son sus lágrimas.
María José Sánchez
majosanchez@gmail.com
El significado de las palabras
(Jorge Luis Borges)
Hasta los diarios más vendidos del país, que deberían recordar haber visto ya estas cosas, hicieron de sus crónicas de esos acontecimientos, meras columnas en amarillo patito: hablaron de represión. La cosa parece haber sido así: “Se lo pido por tercera vez señor, le pido que salgan de la ruta, que se haga a un costado. Se lo pido por favor, -¿Quién dijo que no hay gendarmes educados?- se lo estoy pidiendo por favor”. Luego de las reiteradas negativas (tres), los gendarmes procedieron a cumplir la orden de despejar la ruta para garantizar el constitucional libre circulamiento. Entre varios uniformados se llevaron detenidos a menos de veinte ruralistas que, desde el suelo, se negaban a cumplir este pedido. Fueron tomados desde los tobillos y las muñecas y subidos a las camionetas.
Ahora bien, a muchos nos resulta cuando menos llamativa esta novedosa manera de aplicar lo que los medios masivos de comunicación llamaron represión. Claro que surgen muchas preguntas ante este nuevo significado de ese conocido vocablo, además se comprende porqué Voltaire decía que antes de hablar había que redefinir los términos, ya que se puede usar la misma palabra para referirse a dos cosas diferentes, para expresar dos ideas distintas. Sería bueno saber si a Kosteki y Santillán la policía les pidió tres veces que por favor, por favor señor, dejaran de manifestarse, o tal vez las balas de plomo pidieron permiso antes de agujerearles el cuerpo y quitarles la vida, porque a eso también le llamamos represión. También sería interesantes saber de que manera educada y con que suaves modismos le pidió que dejara de insistir en su reclamo salarial a Fuentealba el oficial que le disparó por la espalda, desbaratándole la nuca de un escopetazo. Es que a eso le decíamos represión, eso nos indignaba, nos hacía saltar las lágrimas de la impotencia.
Tal vez las palabras cambien de significado, o lo que cambie sean los actores, los tipos de reclamos. Pasa que resulta un poco injusto. Pasa que cuando los 24 de Marzo gritamos verdad y memoria no vemos las cacerolas. Pasa que cuando en el sur se matan maestros o piqueteros se desangran en el piso en alguna calle de la capital, o la montada nos pasa por arriba con los caballos en la Plaza de Mayo, no vemos que se corten las rutas con las 4 x 4. Pasa que cuando la inseguridad nos golpea, no hay ninguna conferencia de prensa que dure 100 días.
Para algunos represión no es lo que pasó en la ruta 14 un sábado de junio. Para algunos la represión no es sólo generada por la policía o los gendarmes, sino por el hambre, el sufrimiento, la falta de justicia, la soledad de tantas marchas en las que apenas somos un puñado: porque algunos sectores de la sociedad también reprimen y de las maneras crueles, aunque no empuñen fustas o monten a caballo, aunque no tiren gases lacrimógenos. Reprimen cuando desempolvan las ollas para pedir que los ricos sean más ricos y los pobres sigan muriendo en la miseria.
Entonces, la ignorancia, la falta de educación del pueblo da bronca, da bronca y se llena una plaza. Los que estaban ahí sabrán que a más de la mitad no los llevaron de las narices, ni fueron por un sueldo, sino por ese sentimiento compartido que se llama indignación. Pero lo sabrán sólo quienes allí estuvieron, porque la televisión mostró otra cosa, siempre parece mostrar otra cosa: la tendenciosidad a la orden del día. En fin... a Menen todos lo veíamos jugar al basquet mientras en Tucumán los chicos se morían de hambre, sin micrófonos, sin cámaras.
16/06/2008
María José Sánchez
Mar del Plata, Argentina
majosanchez@gmail.com
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=69125
sábado, abril 05, 2008
La misma injusticia.
sábado, marzo 29, 2008
No confundir campesinos con terratenientes

Las retenciones que el gobierno impone a las exportaciones tienen diversas lecturas y contradicciones que han confundido, y generado que los sectores del campo coincidan en la protesta. Es necesario diferenciar si están juntos y revueltos para desestabilizar al gobierno, o tienen la suficiente claridad para diferenciarse en la lucha y reclamos. Hay que diferenciar y saber si están juntos, pero no revueltos y hasta dónde llega estar juntos sin quemarse.
Recuerdo esa pequeña historia que dice: “El ladrón corre hacia el Este y el policía corre hacia el Este. Los dos corren hacia el Este pero con intenciones diferentes”.
Los productores agropecuarios nunca tuvieron tantas ganancias como en los últimos años, beneficiándose por la política de cambio y las exportaciones de soja y girasol. Los indicadores son elocuentes y concretos. Sin embargo es necesario hacer un análisis de los costos que esa actividad tiene para el país, su rentabilidad y concentración de la riqueza en pocas manos. Las grandes corporaciones agropecuarias, las transnacionales han destruido, y quemado miles de hectáreas de bosques, apropiándose de grandes extensiones de tierra para plantar soja transgénica. Utilizan agroquímicos altamente contaminantes sin importarles las consecuencias para el medio ambiente y vida de los pobladores.
Por otra parte, las contradicciones del gobierno no son pocas, pero hay que reconocer que ha dado algunos pasos importantes hacia la recuperación económica y eso es positivo. El saqueo a que fue sometido el país durante la crisis de 2001 fue un golpe de Estado económico, sacando al exterior los capitales y llevando al cierre de fábricas, desabastecimiento, aumento del desempleo y pobreza, provocado por capitales financieros y el sistema bancario, que buscaron el vaciamiento del país sin importarles las consecuencias sociales.
Sectores de la llamada “clase media, acomodada” salieron estos días en “apoyo al campo” con la cacerola de acero inoxidable y cucharita de plata a apoyar el paro agrario.
La falta de memoria, a muchos les ha jugado una mala pasada. Se olvidaron que la clase media acomodada siempre creyó estar a salvo de la debacle del país. La realidad les demostró que el capital financiero no tiene amigos, tiene intereses y que también fueron víctimas del vaciamiento económico y muchos perdieron sus recursos y ahorros depositados en los bancos. Es necesario hacer memoria y saber porqué hoy nadie se hace responsable de esa situación y lamentablemente la impunidad continúa.
El gobierno tiene que asumir que se equivocó al poner las retenciones por igual y no diferenciar a los pequeños y medianos productores rurales, que son la mayoría, y muchos con serias dificultades en su producción y con sus campos hipotecados; se equivocó al juzgarlos con la misma vara con que mide a las grandes corporaciones y terratenientes que tienen ganancias exorbitantes que sacan del país y que no están dispuesto a la re-distribución de la riqueza.
Reitero, estamos frente al cuento del ladrón y el policía, en que los dos corren hacia el Este pero con intenciones diferentes.
La presidenta Cristina Fernández Kirchner pidió que levanten el paro para dialogar y encontrar una salida al conflicto. Es una medida prudente que los productores rurales no pueden dejar pasar. El diálogo es el camino para encontrar soluciones.
El gobierno no puede volver a equivocarse y tiene que diferenciar al campesino de los terratenientes. No hay que permitir ni dejarse arrastrar por los golpistas para que se enfrenten trabajadores contra trabajadores
Hay veces en la vida que la enseñanza es dura, pero se aprende. Los campesinos luchan por sus derechos y resisten en la esperanza para alcanzar a vivir con dignidad y recuperar la soberanía nacional, hoy amenazada por los grandes intereses económicos que se niegan a re-distribuir la riqueza.
El gobierno debe tener políticas claras y coherentes entre el decir y el hacer. Hoy están vendiendo el territorio nacional, devastando sus riquezas y empobreciendo al pueblo. Las retenciones son necesarias, no sólo al agro, a las empresas mineras, a las petroleras, para ello es necesario políticas públicas para evitar la explotación irracional y recuperar la soberanía perdida. Las retenciones deben dirigirse correctamente para construir el país que queremos.
Queda un largo camino a recorrer que es necesario asumir entre todos y todas.
Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=65279
sábado, julio 21, 2007
La despedida imposible...
martes, mayo 08, 2007
Lo que le escribió Miguelito a Mafalda después de tantos años....
Querida Mafalda:
En este día tan especial me acordé de tu cumpleaños...¡ cómo pasa el tiempo! Nacimos en el corazón de un país que soñaba. ¡ cúantas utopías!
¡ cuántos deseos de crecer, de mejorar las cosas !
Nos tocó convivir con un tiempo de hombres creativos: Luther King, Che Guevara, Juan XXIII; nos transmitieron el sentido de la justicia, el valor de los sentimientos, la maravillosa aventura de pensar con la propia cabeza....
Ayer me preguntaba por nuestra amiga Libertad, aquella pequeñita que un día encontraste en una playa, no me acuerdo si era Santa Teresita oMar de Tuyu, me acuerdo todavía cuando la presentaste a tus padres.... Era vivaracha y quemadita por el sol de febrero.
¿ dónde vive Libertad? ¿ es verdad que la mataron durante la dictadura?,Dicen que la torturaron y su cuerpo despareció en el Río de la Plata.....
Me cuesta pensar que se murieron sus sueños. ¿ y si vive ? ¿estará filosofando sobre la fragilidad de las cosas y el sentido de la vida?
¿ Qué fue de Susanita? ¿ se casó? ¿ Pudo realizar su vocación de ser madre?
La imagino viviendo en alguna ciudad de provincia, paseando del brazo del marido (un hombre bajo y calvo) en una tarde de verano, contenta con sus hijos y cuidando el primer nieto, realizada como tantas comunes mujeres...
Supe de Manolito, que perdió sus ahorros durante el corralito y no soportó tanta crisis.
Los últimos días lo vieron cabizbajo, murmurando palabras incoherentes, abandonado como un mendigo en una estación de trenes,triste y abatido como tantos........
Sé que Felipe vive en LaHabana, que probó con el cine, que tiene un taxi y habla a los turistas de Fidel y de la Revolución con el mismo entusiasmo que cuando vivía en Buenos Aires....
A Guille, tu hermano, lo escuché tocar, hace poco, en la Scala de Milán. Vive en Ginebra, nunca se arrepiente de haber emigrado en los últimos años de Alfonsín,me contó que es feliz con su nueva pareja.....
Y vos, querida amiga, ¿cómo estás?
Hace tanto tiempo que no tengo noticias tuyas.
Sé, por otros que sigues escuchando la radio, que lees los diarios del mundo, que te duele el Irak como te dolía Vietnam, sé que trabajas para la FAO por los pueblos del hambre, que estás indignada por la prepotencia de Bush.
Me llegó tu pedido de juntar medicinas para los Médicos sin Fronteras, sé que siguen las reuniones en tu casa de París,que estás confundida, inquieta y preocupada por el futuro del mundo.....
En fin, Mafalda, sé lo suficiente como para saber que seguís viva, viva en el alma, niña como siempre...
De parte mía sigo escribiendo siempre, renegando porque me falta tiempo; creyendo como siempre, en el valor de la sinceridad, perdiendo oportunidades por manifestar mis ideas.
Algunos días estoy triste y deprimido, pero puede siempre más la alegría que la tristeza...
El mundo no mejoró mucho desde la época en que vivíamos juntos en nuestra patria. A veces, cundo miro el globo terráqueo, encuentro tu mirada, pienso en todos aquellos que lo miran como vos, en los ojos de los que protestan, de los que no se conforman, y de los que viven en la atmósfera del optimismo y de la justicia....
Esos ojos, junto a los míos, te desean un buen día, querida amiga, por otros cuarenta años tan intensos y jóvenes como los que has vivido.
Un beso grande de tu amigo que te quiere como siempre.
MIGUELITO
martes, enero 02, 2007
FELICIDADES

cuyas voces no se oyen,
y las acciones violentas de los malos,
Este es el deseo de los que hacemos "Las Noticias de Macondo".
viernes, diciembre 22, 2006
Heredarás la Guerra

En esta Guerra legada hay quienes nos miran desde arriba y con la suela nos aplastan. Los de abajo no nos acostumbramos a vivir pegados al piso y desde esa convicción peleamos: luchamos para no tener que luchar nunca más, para que esta batalla no la gane siempre el hambre y la muerte, el dolor y el olvido, la impunidad y la decadencia. Sin golpes traicioneros, sin escaladas de desgracia.
Quien esta mucho tiempo matando para vivir, termina viviendo para matar. Y ese es el fin principal de los que nos instalaron esta Guerra. No nos acostumbremos a asimilar así las horas. Arremetamos contra la inmovilidad. Usemos la palabra, despertemos a los muertos que respiran con estas nuestras manos, que no golpean, sino que trabajan. No enarbolemos banderas de victorias que no llevan a nada, sino la bandera de una igualdad dignificada. Aquella que se logra cuando la Guerra culmina en la eliminación de la Guerra misma.
Dejemos de ser de esos soldados que se ven obligados a cavar su propia tumba. No tallemos conscientes nuestra propia lápida, no nos cubramos con la tierra de la ignorancia.
Organicemos esta desesperación que nos rebalsa, pero no fabriquemos cañones de venganza. Pongámonos de pie y cultivemos las ideas con escéptica esperanza.
Opongámonos aprendiendo, evitando así el fácil manejo. Cortemos los hilos que decretan nuestros movimientos. Cerremos de una vez las fauces de la Violencia, hambrientas de nuestra jugosa carne. Que la Guerra es la barbarie, lento exterminio, y la educación es el camino de la lucha hacia la liberación de esta herencia suicida, que no es más que una condena sin juicio previo. Y ya es hora de apelarla.
majosanchez@gmail.com
jueves, diciembre 21, 2006
¿Argentinos = Ignorantes?

Ignorancia no es simplemente “no saber”, es mas que eso. Ignorancia es desentenderse del otro, sin saber que el otro no es más que uno mismo, visto desde otro lado y en otras circunstancias. Ignorancia es olvidar, sin saber que un pueblo sin memoria es la más perfecta maquina que existe para repetir los mismos errores. Ignorancia es obedecer mansamente las disposiciones que hacen aquellos que solo saben hacer negocios con nuestras vidas. Ignorancia es responder solo con violencia a todo lo que nos daña, sin saber que esa es una de las peores mentiras que nos han contado, no hay nada más contraproducente: es que siempre nos llega la información distorsionada. Ignorancia es regalar la sangre propia y nuestra para regar un árbol ajeno y sucio, que solo da frutos podridos, rancios. Eso es ignorancia. Eso es ser ignorante.
Me resisto a creer que eso también es ser Argentino. Me resisto a creerme eso, a asimilar la realidad del presente, a aceptar el pasado y a recibir el futuro como si fuera de otro, como si todos aquellos que oponiéndose a esta ignorancia murieron de pie por no vivir de rodillas no se murieran otro poco cada vez que aceptemos las derrotas sin hacer nada.
Elijamos creer otra cosa, elijamos otra forma de existencia. Hagamos de la vida una convicción y desechemos esta pasividad de tumba. Mantengamos los preceptos y las ideas con esa persistencia que solo pueden dar las desilusiones repetidas y las ganas de revertirlo, cuando ambas se combinan; y, así, podremos atravesar el desamparo que da la desidia y el escepticismo con el que últimamente se respira.
No nos queda más que desintegrar el miedo que fomenta el desconocimiento y aprender, de una vez y para siempre, que la única ignorancia de la que no se vuelve es aquella que aun sabiéndolo todo, se niega a comprometerse en hacer algo para cambiarlo.
majosanchez@gmail.com